Somos especialistas en el reparación de humedades por condensación, que es uno de los tipos de humedades más habituales que aparecen en las viviendas.
La condensación proviene de la gran humedad ambiental de nuestro país, sobre todo en determinadas zonas, como el norte, en el que las brumas y las lluvias son muy habituales.
Este hecho, unido a la humedad que generamos nosotros mismos en el interior de la vivienda (en la ducha, la cocina, calefacción de butano o Keroseno, vahos, secado de ropa en el interior de la vivienda), la mala ventilación de algunos espacios y el incorrecto aislamiento de las paredes interiores y exteriores hacen que existan en el aire en suspensión varios litros de agua.
Esta agua en suspensión, con la caída de la noche, encuentra un lugar frío (cristal, ventana de aluminio o la esquina de la habitación que da al Noroeste) o mal ventilado (armario, cortinas, etc.) y se transforma en agua líquida, que queda absorbida por el yeso de la pared.
El moho de las paredes es causado por este tipo de humedad
En este ambiente húmedo, el moho anida y se va extendiendo progresivamente (como por ejemplo el queso en la nevera que enmohece) al resto de las paredes próximas, dando lugar a un auténtico problema de salubridad.